viernes, 6 de marzo de 2009

Voluntad y direcciòn en la elecciòn del humano


Adelántate y no pierdas tu rumbo, pues ya estás en vuelo. En la oscuridad de la noche, los pequeños insectos son atraídos por la luz artificial y permanecen revoloteando en torno de ella hasta que son quemados por la propia ilusión que los atrajo. Presta atención a lo que se te indica, dedícate al Supremo Ser y no te disperses en superficialidades. Cuida lo esencial y así estarás en la dirección correcta. Para cada cerradura su llave, para cada planta el suelo adecuado, para cada ciclo, su meta. No te pierdas en los pensamientos, sentimientos y acciones que mecánicamente emergen de tu mente; no hagas como los insectos. Tu camino no te lleva a las luces materiales, sino al encuentro con la luz de las estrellas lejanas, pues en el cosmos tienes tu Morada.